2019

¿Por qué todo lo nuevo nos atrae? ¿Será porque lo antiguo resulta cansino o ha fracasado? Cada nuevo año se dejan atrás los fracasos del anterior y se hacen “firmes propósitos” de aprovechar los 365 días gloriosos que hay por delante. Creo que lo nuevo nos atrae porque, al fin y al cabo, todos tenemos alma de exploradores, además de una irreconciliable amistad con lo viejo y gastado. En publicidad saben explotar al máximo esta tendencia del ser humano a lo novedoso. Si quieren actualizar algún producto simplemente añaden “nuevo” a la marca y nuestra curiosidad es despertada.

Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor. (Lucas 2:10-11)

La más grande novedad que el mundo ha experimentado es aquella que se gestó en el vientre de María y nació en un lugar humilde: JESÚS. Él vino para ser Luz, iluminando nuestro camino hacia la salvación; Él vino para ser nuestro Pan, calmando nuestra hambre; Él vino para ser nuestra Agua, hidratando nuestra sed; Él vino a ser Pastor, llevándonos al cielo. Nada ni nadie puede ofrecer todo lo anterior, sólo Jesucristo. Lo novedoso que la sociedad ofrece es lo mismo pero maquillado y la felicidad que aporta es humo, sin embargo, en Jesús siempre hayamos nuevas cada día porque El gran amor del SEÑOR nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad! (Lamentaciones 3:22-23).

Deseo para ti que este nuevo año conozcas a Jesús. Él dio Su vida por ti en una cruz para que pudieses ser salvo de la condenación de tu pecado contra Dios. Arrepiéntete y cree en Él y serás eternamente salvo. La condenación que pesaba sobre ti será borrada y te hallarás libre de culpas. ¿Qué más novedoso que tener la oportunidad de nacer de nuevo y librarte del infierno? Eso te ofrece Cristo.

Meta 2019: Nacer de nuevo.

¡QUE DIOS TE BENDIGA!